Los factores relacionados con la patogénesis de la recesión
gingival pueden clasificarse en factores predisponentes
y factores determinantes:
Factores predisponentes
Son condicionantes morfológico-anatómicos que determinan
la posición del margen de la encía. Estos son:
- Banda de encía adherida estrecha
- Frenillos
- Malposición dentaria
- Fenestración y dehiscencia del hueso alveolar
Factores determinantes
Son aquellos que inciden directamente en la formación de
la recesión gingival. Destacan sobretodo:
- Trauma del cepillado
- Enfermedad periodontal
- Tratamiento ortodóncico
La recesión gingival es una entidad de etiología
multifactorial, que no ha sido totalmente aclarada. La revisión
de la literatura sobre los factores más importantes relacionados
con la patogénesis de la recesión gingival nos lleva
a las siguientes conclusiones:
La falta de encía adherida no predispone la aparición
de recesión gingival si se consigue un buen control de placa
y éste se realiza mediante una técnica de cepillado
atraumática y con un cepillo de cerdas suaves.
Los frenillos pueden favorecer el desarrollo de recesión
gingival mayoritariamente en dos casos: cuando el frenillo tiene
una inserción papilar y cuando el frenillo se inserta en
tejido gingival y existe falta de encía adherida.
Los dientes inclinados hacia fuera suelen tener una banda de encía
adherida más delgada por vestibular que los dientes situados
correctamente en la arcada. Cuando los dientes emergen en malposición
pueden presentar dehiscencias del hueso alveolar. Si un diente presenta
una dehiscencia, pero existe una adecuada banda de encía
adherida, es improbable que se produzca una recesión. Por
el contrario, si existe una banda de encía adherida insuficiente,
el menor traumatismo puede producir recesión.
El cepillado de dientes erróneo y traumatizante es el factor
precipitante de mayor trascendencia en la etiología de la
recesión gingival. Pueden influir muchos factores para que
éste se convierta en erróneo y traumatizante: el material
de las cerdas del cepillo, la forma de las terminaciones de las
cerdas, la presión ejercida con el cepillo, la frecuencia
del cepillado, la técnica de cepillado, etc. Se debe controlar
cada uno de estos factores en las visitas de instrucción
de higiene y control de placa para prevenir la recesión gingival.
La enfermedad periodontal normalmente causa pérdida
de inserción en forma de bolsas periodontales, pero también
puede producir pérdida de inserción en forma de recesión
en dientes donde el tejido gingival y el hueso alveolar tienen un
grosor reducido. También es posible que, con la edad, la
profundidad de sondaje se estabilice y la pérdida de inserción
se produzca en forma de recesión. Por último la recesión
gingival puede ser un proceso de remodelación compensatoria
de la arquitectura de la encía , debido a la pérdida
de soporte periodontal entre los dientes.
Los estudios experimentales realizados en animales demuestran que
los movimientos ortodóncicos pueden producir recesión
gingival, en cambio los estudios epidemiológicos que comparan
poblaciones de personas tratadas y no tratadas ortodóncicamente,
apenas muestran diferencias de prevalencia de recesión gingival.